El miércoles 7 de abril de 2023, la mezquita de Al-Aqsa, en la Ciudad Vieja de Jerusalén, se convirtió en escenario de violentos enfrentamientos entre la policía israelí y jóvenes palestinos. La redada policial, que incluyó el uso de granadas aturdidoras, tuvo lugar durante el mes sagrado del Ramadán para los musulmanes y en la víspera de la festividad judía de Pésaj.
Los enfrentamientos se extendieron más allá de Jerusalén, con insurgentes palestinos disparando cohetes hacia el sur de Israel y provocando repetidos ataques aéreos israelíes en Gaza. Desde el inicio del Ramadán el pasado 22 de marzo, decenas de fieles musulmanes han tratado de pasar la noche en la mezquita, una práctica que suele permitirse solo durante los últimos 10 días del mes sagrado. La policía israelí ha entrado a desalojarlos, avivando las tensiones con los jóvenes palestinos que exigen poder rezar en el complejo hasta el amanecer.
El sitio de la mezquita de Al-Aqsa es sagrado tanto para judíos como para musulmanes. Al-Aqsa es el tercer sitio más sagrado del Islam y durante el Ramadán suele estar lleno de fieles. En el judaísmo, el lugar es conocido como Monte del Templo y es el sitio más sagrado de esa religión, ya que se considera que allí se levantaban los templos judíos bíblicos. Las reivindicaciones enfrentadas alimentan las constantes tensiones que derivaron en violencia en muchas ocasiones en el pasado.
El conflicto se ha intensificado aún más por los llamados de ultranacionalistas judíos a realizar el sacrificio ritual de una cabra en el recinto, imitando una antigua costumbre de la Pascua en tiempos bíblicos. Israel prohíbe estos actos en el lugar, pero los llamados de los extremistas judíos a reavivar la práctica, incluyendo ofertas de recompensas en efectivo a quien intente introducir siquiera un animal en el complejo, han aumentado el temor entre los musulmanes a que Israel esté intentando hacerse con el control del sitio.
La agencia noticiosa oficial palestina, Wafa, reportó que docenas de fieles que pasaban la noche rezando resultaron heridos en la incursión policial. El ejército israelí, por su parte, indicó que uno de sus soldados recibió un disparo en un incidente separado en Cisjordania.
Las tensiones en Jerusalén y la región han llevado a temores de un conflicto a mayor escala. Hace dos años, choques similares dieron pie a una guerra de 11 días entre Israel y Hamas, el grupo insurgente que gobierna la Franja de Gaza. En este contexto, la comunidad internacional ha llamado a la moderación y a la búsqueda de una solución pacífica para la situación en Jerusalén.